Un avivamiento llegó a nuestra casa en la noche del 3 de mayo, 2008:

Un avivamiento llegó a nuestra casa en la noche del 3 de mayo, 2008:

Alfredo y Víctor regresaron de la iglesia esta noche comentando sobre el comportamiento incorrecto de algunos de los compañeros de Víctor. Cuando llegaron a la casa, Valeria y mami ya estaban alistándose para irse a dormir y teniendo un tiempo con Dios. Víctor dijo “Mami, hay algún versículo bíblico que hable acerca de no mostrar nuestras zonas privadas?” --Sí hay versículos de eso, los voy a buscar y te los voy a dar.
Un corto tiempo después todos estábamos sentados en la cama de Valeria y yo les compartía cómo en el principio Adán y Eva no usaban ropa (Víctor aclaró que las zonas privadas pueden mostrarse a la esposa o esposo, que es algo que nosotros les hemos dicho). Valeria pegó un grito de solo pensarlo y pensé entre mi, que… ¡realmente las niñas son más recatadas que los varones! ¡Las diferencias de género son notorias aún a esta corta edad!

Leímos en Gen. 2 y les dije que como habían pecado Dios les había hecho ropa de piel de animales. Víctor inmediatamente dijo: ¡Wow, Dios todavía seguía amándolos aun después de que habían pecado! El siguió cuidándolos.
“Víctor, ¡esa es una profunda comprensión teológica!” Puso cara de confundido y Alfredo y yo nos reímos puesto que mi comentario realmente había sido para Alfredo… sin embargo Víctor se vio complacido al saber que de alguna forma lo estábamos elogiando.
Desafortundamente a Valeria se le cerraron los ojos y se quedó dormida mientras Alfredo y yo proseguíamos con el “avivamiento” de Víctor hasta el cuarto de él.

Lo que leerán a continuación son una serie de expresiones dichas por Víctor en nuestra presencia. El Espíritu Santo estaba actuando tan claramente en la vida de este niñito que en algunos momentos no pudimos evitar llorar de gozo.

Hicimos un "sandwich de amor" con Víctor mientras lo escuchábamos atentamente meditar en voz alta y compartir con nosotros sus pensamientos y sentimientos. En cierto momento, le dije, “Víctor, tienes alguna otra cosa que decir? No—dijo—solo siento gozo.

• "Siento como si mi corazón tuviera hambre por la Palabra de Dios.” "No puedo quitarme esta sonrisa que tengo."

• "Mi mente me está diciendo que la Biblia es un tesoro para mí."

• "Quiero leer la Biblia más y aprender más de ella. "

• "Quiero darle un abrazo a Jesús."

• "Mi corazón se siente muy bien."

• "Todos esos tipos malos que he visto en películas se están saliendo de mi mente. No puedo dejar de sonreír, lo veo en mi mente..."

Es tan claro ver que el Espíritu Santo vive y está activo en su corazón. ¡ La imaginación de los niños es tierra tan fértil para el trabajo del Espíritu!

• "¡Quiero leer la Biblia siete veces al día!"

• "No me puedo dormir, de tanto gozo que siento en mi corazón. "

• "Papi y mami, ¡estoy muy agradecido de que ustedes estén conmigo en este momento!
• "Papi, dime…¿qué puedo hacer para contarle a otros acerca de Dios?
• Necesito aprender más de la Biblia."
• "Mis ojos tienen ganas de llorar."

• "Quiero dormir abrazando a Dios…o abrazando la Biblia. ¿Puedo? "

“Víctor, qué te parece si te escribo algunos versículos para que los lleves a la escuela y puedas aprenderlos durante el día,” le pregunté.

"Le voy a contar a mi maestra lo que me ha pasado hoy… ¿Cómo se llama esto que me está pasando hoy?
Mami: ¡Es que el Espíritu Santo está trabajando en tí!
Papi: ¡Jesús está llenando tu vida con Su Espíritu!
Víctor: ¡El diablo está solo!. Dios tiene a Su Hijo (y al Espíritu Santo, añade mami.) Sí…pero, ¿cómo es que Dios tiene un Hijo si El no tiene esposa? ¿A Dios se le puso grande la panza?
Cómo predecir la forma en la que Dios va a trabajar en el corazón dispuesto de un niño? Nos contamos como muy bendecidos y no reclamamos la gloria para nosotros por algo que fue Dios quien lo hizo. Lo que sucedió fue entre Víctor y Dios y nosotros únicamente tuvimos el privilegio de estar presentes.

¡Regocíjense con nosotros con el mover soberano de Dios en la vida de nuestro amado hijito! Alfredo y Lisa

Nota: Este relato fue escrito originalmente en inglés por Lisa y traducido con amor y emoción por tía Silvia. ¡Merece ser compartido con nuestros amados de habla hispana!